08 abril 2013

El Suroeste de Francia

En nuestro afán por seguir visitando lugares donde probar un buen vino, no podía faltar una visita a Burdeos y Saint-Emilion, pero como no sólo de vino vive el hombre... y la mujer, nos acercaremos también a los pueblos del Perigord negro, famosos por ser la cuna de los foies de oca franceses y por la abundancia de trufa negra.
El vuelo nos dejó en la ciudad de Toulouse a la que volvimos el último día a dedicarle una pequeña visita.
En un coche de alquiler salimos a recorrer los 250 kilómetros que separan Toulouse de Burdeos para descubrir una joya de ciudad, patrimonio de la UNESCO desde junio de 2007 y que posee un conjunto urbanístico y arquitectónico excepcional. Después de París es la ciudad francesa con más monumentos históricos protegidos y con casi un cuarto de millón de habitantes, la capital de Aquitania es la quinta ciudad de Francia.

Catedral y Ayuntamiento de Burdeos

Puerta Cailhau


Como nos alojamos en el centro histórico, el coche hubo que aparcarlo a 25 minutos de agradable paseo desde nuestra base para los siguientes días.

Céntrica calle


Burdeos merece una visita de al menos 1 día completo. Nosotros pasamos 4 dias por la zona dedicando la primera tarde y el día siguiente a llevarnos una grata sorpresa paseando por las numerosas calles peatonales de la ciudad, la ribera del Garona, la maravillosa Plaza de la Bolsa, que si de día es bonita, el alumbrado nocturno es espectacular, la comercial rue de Sainte Catherine, la Catedral de Saint André, la elegante Cours de l'Intendance, el multiétnico barrio de Saint Michel. En fin mucho que ver aparte de disfrutar de la multitud de terrazas de cafés y bares repletas de gente a pesar del frío reinante. Se adivina una ciudad con mucha vida.

Plaza de la Bolsa

Plaza de la Bolsa

Iglesia de Saint Michel

El tercer día lo dedicamos a Saint-Emilion, pequeña a villa a unos 40 km de Burdeos en la que se concentran buena parte de las bodegas más importantes de la zona. El pueblo tiene mucho encanto y está lleno de plazas y rincones para pasear. Hay infinidad de locales dedicados al vino, tiendas especializadas y bodegas para visitar y probar. Aquí compramos un par de botellas para la cena.

Saint-Emilion

Viñedos en Saint-Emilion

Detalle de Comercio

¿Alguien dijo vino?

El último día que pasamos en ésta zona, lo pasamos cerca del mar. Fuimos a Cap Ferret, frente a la Duna de Pilat, unas playas geniales y algún pueblo digno de visitar como L'Herbe, dedicado enteramente a las ostras, las cuales probamos como era menester.

Duna de Pilat

Ostras en Cap Ferret

Dejamos Burdeos para adentrárnos en la zona del Perigord negro. Aquí visitamos el precioso pueblo de Sarlat-La Caneda (si vais por aquí tened cuidado con las horas de las comidas, 12:00 a 13:30 y 17:30-19:30) la verdad es que para ser un viernes por la tarde, parecía un pueblo fantasma. No había nadie por las calles, motivo que aprovechamos para pasear y tirar fotos sin ninguna molestia.

Sarlat - La Caneda


Sarlat - La Caneda



Sarlat - La Caneda


La mañana siguiente había mercadillo, con lo que el pueblo estaba mucho más animado y aprovechamos, ya pensando en la cena, para comprarle a un lugareño unas cuñas de riquísimos quesos de la zona. Partimos hacia Toulouse, última etapa de nuestra semana, no sin antes pasar por 3 pequeños pueblos muy interesantes de visitar: Beynac, Domme y La Roque.

Beynac - Et - Cazenac

Quizá Domme, en el que paramos para degustar magret y confit de pato, sea el más prescindible, pero tanto Beynac como La Roque merecen una corta pero pausada visita. Ambos a la ribera del Dordoña, están perfectamente integrados en el paisaje y muy bien conservados. Las primeras noticias que se tienen de ambas villas datan del siglo XII. Y la sensación es que han cambiado muy poco desde entonces.

La Roque - Gageac


Llegamos por la tarde a Toulouse y sólo nos dio tiempo a un pequeño paseo por el centro peatonal de la ciudad, ver la Plaza del Capitolio en el Vieux Toulouse,  y comprobar la diferencia entre los pequeños pueblos apenas habitados que acabábamos de conocer y una gran ciudad con un rápido sistema de transporte público a rebosar de gente.

Toulouse. Plaza del Capitolio
 
Vamos a comernos los quesos y el foie que compramos esta mañana, mañana volamos de vuelta a casa.

Quesos de la zona

Al final, vuelos para 4 personas, coche de alquiler y 6 noches de alojamiento por 1.100 € los cuatro.
¿Os animáis?
Esperamos que os entren muchas ganas de visitar la zona, y ya sabéis, en nuestro blog os personalizamos vuestro viaje. Os buscamos vuelos, alojamientos, coches de alquiler, os recomendamos restaurantes, museos, tiendas, todo lo necesario para que disfrutéis de vuestra escapada.

Las dudas y consultas podéis hacerlas aquí: conlamaletaenlapuerta@gmail.com